Hora de seguir tocando palos, en esta ocasión con una trilogía de videoclips pertenecientes al grupo M83. El dúo francés ha compuesto la banda sonora de Oblivión, una película de ciencia ficción estrenada hace un par de semanas que desde aquí recomiendo a todo buen aficionado al género. Si se acercan al cine van a disfrutar con un buen argumento, con una Tierra desolada que fascina en su apariencia ballardiana y con la presencia de un Tom Cruise en plena madurez interpretativa. Es un filme sumamente entretenido e interesante cuya conclusión defraudará a no pocos, no por una inexistente falta de calidad, sino por las muchas similitudes que presenta con el final de otra película, una de las más vapuleadas dentro de la filmografía de Roland Emmerich.
La banda sonora compuesta por M83 complementa muy bien las imágenes, dotándolas de un halo a ratos futurista, a ratos épico, una agradable mezcla cuyas notas recuerdan por momentos (a veces demasiado) al Hans Zimmer de Origen en las partes rítmicas y al de El último samurai en las melódicas. Aunque es la primera vez que el grupo compone un score completo, algunos de sus temas ya habían figurado en los de otras películas. M83 es en realidad una banda que lleva más de diez años especializada en música electrónica. En 2012 dieron la campanada con una serie de tres vídeos que conformaban una magnífica historia de, por supuesto, ciencia ficción.
Tres temas musicales, incluidos en el álbum Hurry Up, We're Dreaming, fueron el soporte musical de un argumento que incluye varias de las temáticas de la cf y que va adquiriendo capítulo a capítulo una carga de simbolismo que eclosiona finalmente en un festival de referencias dirigidas al conocedor del género; Akira, El pueblo de los malditos, 2001 una odisea del espacio, La princesa Mononoke, Perdidos y un sinfín de guiños que se nutren del acervo acumulado por el espectador afín al género fantástico. Ese continuo apuntalamiento de imágenes reconocibles es a la vez fin (por el potente efecto que produce su unión con la música) y medio, pues va configurando una trama narrada à la Lindelof, una estrategia que funciona particularmente bien en el terreno del videoclip y en la que el juego de rellenar huecos ofrece grandes satisfacciones.
Anthony Gonzales, uno de los miembros del grupo, es el responsable inicial del proyecto, pero los directores de esta videopelícula en tres actos son el dúo Fleur & Manu, que demuestran, como otros hicieran antes, lo bien que se complementan las imágenes de cf y la música. Las canciones son excelentes, cada una en un registro diferente, desde el muy rítmico Midnight City al más pausado Wait, y se amoldan perfectamente a las imágenes, las cuales incluyen unos efectos visuales que podrían competir con los de cualquier superproducción hollywoodiense.
Anthony Gonzales, uno de los miembros del grupo, es el responsable inicial del proyecto, pero los directores de esta videopelícula en tres actos son el dúo Fleur & Manu, que demuestran, como otros hicieran antes, lo bien que se complementan las imágenes de cf y la música. Las canciones son excelentes, cada una en un registro diferente, desde el muy rítmico Midnight City al más pausado Wait, y se amoldan perfectamente a las imágenes, las cuales incluyen unos efectos visuales que podrían competir con los de cualquier superproducción hollywoodiense.
Disfruto una y otra vez de la historia que componen estos tres vídeos y me vienen a la memoria productos similares. Son innegables las deudas que mantiene esta trilogía con la película de dibujos animados Interstella 5555, suma de los videoclips del álbum Discovery creado por el también dúo francés Daft Punk, el espejo al que parecen mirarse M83. Pero hay otros ejemplos en territorios cercanos, como Heavy Metal, aquella inolvidable película en la que a golpe de guitarra eléctrica se midieron los mejores dibujantes de la época, o la maravillosa versión musical de La guerra de los mundos imaginada por Jeff Wayne, de la que por cierto tuvimos nueva versión el año pasado.
Viendo el fascinante resultado de todas estas producciones me pregunto por qué no se hacen más cosas de este tipo.
Viendo el fascinante resultado de todas estas producciones me pregunto por qué no se hacen más cosas de este tipo.
M83 Midnight City
M83 Reunion
M83 Wait
De lo mejor que se ha visto en el cine cf últimamente. Aunque, para mí, lo peor es precisamente la BSO de M83.
ResponderEliminarHans Zimmer (nada revolucionario, pero casi siempre eficiente en sus partituras cinematográficas) ha sido más hábil a la hora de jugar con la materia musical ya escrita. M83 lo fusila. Así. Sin más.
M83, Oblivion:
http://www.youtube.com/watch?v=RRywL8RKIQE
Zimmer, Dark Knight (cualquiera de las tres, el tema lo utiliza en varias ocasiones):
http://www.youtube.com/watch?v=VbIdnMgfb-4
Posdata: sobre Emmerich, paso palabra; ni como animal de compañía, ni tomándoselo a coña.
Un saludo, desaparecido de Caralibro.
Lástima que el final sea tan parecido al de ID4. Y sí, también se parece a la de Batman, pero porque Zimmer se "autohomenajea" mucho. Creo que es más Inception que otra cosa.
ResponderEliminarCuatro meses ya, y lo que queda. ;)